viernes, 6 de diciembre de 2013

Resumen de: "El niño" María Montessori


 “El niño: el secreto de la vida” de María Montessori

Las delicadas construcciones psíquicas, los períodos sensitivos.
En el niño existe la actitud creadora, la energía potencial para construirse un mundo psíquico a expensas del ambiente.
Los períodos sensitivos están estrechamente relacionados con el fenómeno del desarrollo.
El desarrollo, el crecimiento, se puede comprobar exteriormente y desde algún tiempo se ha penetrado en su mecanismo interno.
Existen dos factores para penetrar:
1. estudio de las glándulas de secreción interna -> crecimiento físico -> Considerable influencia práctica en el cuidado de los niños.
2. estudio de los periodos sensitivos -> permiten la posibilidad de comprender el crecimiento psíquico.

Hugo de Vries, científico holandés descubrió los periodos sensitivos en los animales.
El currículo Montessori ha encontrado en sus escuelas los periodos sensitivos en el crecimiento infantil y lo han utilizado para la educación.
Periodos sensitivos: Sensibilidades especiales que están en los seres en evolución por lo tanto en los estados infantiles. Estos periodos son pasajeros y se limitan a la adquisición de un carácter determinado. Una vez desarrollado este carácter, cesa la sensibilidad correspondiente.
Cada carácter, como el lenguaje, se establece con la ayuda de un impulso, es decir, de una sensibilidad pasajera. Por lo que el crecimiento es un trabajo minuciosamente dirigido por los instintos pasajeros que impulsan hacia una actividad determinada, la cual (la actividad) es distinta de la que caracterizará al individuo adulto.

Si el niño no ha podido actuar según las directivas de su periodo sensitivo, se perderá la ocasión de una conquista natural, y se habrá perdido para siempre.
El niño aprende en los periodos sensitivos, lo cual se podría comparar a un estado eléctrico que da lugar a fenómenos activos. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario